El montañero zamorano, ya en Kathmandú, dedica su última gesta a sus padres y hermanos y agradece todo el apoyo recibido.
El montañero zamorano Martín Ramos se encuentra ya en Kathmandú, desde donde hoy ha publicado una entrada en su blog donde agradece el apoyo recibido en su ascenso al Kangchenjunga, que dedica a sus padres y hermanos, y donde se muestra satisfecho y feliz "por lo que ascendí y por poderlo contar".
Así, en el blog del montañero zamorano y en su página de Facebook, Martín Ramos analiza su experiencia en una breve pero emotiva entrada en la que analiza su última gesta, coronando un nuevo ocho mil. Ademàs de agradecer el apoyo a sus patrocinadores y al micromecenazgo, Ramos dedica el ascenso a sus padres y hermanos, sin olvidar a su mujer, Mercedes, y a su hijo Martín, que "suben conmigo, sufren conmigo y esperan".
Reproducimos las palabras del zamorano, que figura por méritos propios en la élite del alpinismo.
"Me pongo delante del ordenador y no fluyen las palabras.
Lo primero me gustaría daros las gracias por todas vuestras palabras de ánimo que he recibido durante esta nueva experiencia que ha sido el Kangchenjunga.
Gracias a la Concejalía de Deportes del Ayto. De Zamora, a Caja Rural de Zamora y Panadería el Viso. A los que me han apoyado en el micromecenazgo.
Quiero dedicarle el Kangchenjunga a mis padres y mis hermanos, porque siempre han querido que sea feliz.
A Mercedes y a Martín no les tengo que dedicar nada porque ellos son "Kangchenjunga" yo subo gracias a ellos, suben conmigo, sufren conmigo y lo que es peor... Esperan. Os quiero.
He terminado mis nueve ocho miles... No se qué nos deparará el futuro, de lo que estoy seguro es que he vivido lo que nunca hubiera podido imaginar. Satisfecho por cómo los ascendí y feliz por poderlo contar.
Gracias a todos".
