Jeff Solarin, estadounidense con pasaporte nigeriano, llegó al Club Baloncesto Zamora casi a mitad de temporada (Enero de 2016) y rápidamente se convirtió en la sensación del equipo azulón y uno de los favoritos de la grada.
Un jugador que será sinónimo de espectáculo y lucha, que los aficionados podrán disfrutar una temporada más en el Angel Nieto. A pesar de su escasez de centímetros, su potencia de salto y hambre reboetadora le permiten competir, y generalmente ganar, cualquier balón suelto asi como modificar tiros cercanos al aro con su intimidación y rápido timming de salto.
Nacido en Denver (Colorado) y con nacionalidad Nigeriana, fue compañero de Chris Hansen durante su etapa universitaria (Idaho State) en la NCAA y con quien mantiene una amistad que se extiende más allá del terreno del juego, de hecho, fue la recomendación del tirador estadounidense la que permitió a Jeff comenzar su etapa profesional a las órdenes de Saulo Hernández. Sinónimo de intensidad y rebote, completa su faceta ofensiva con movimientos sencillos al poste y un tiro de media distancia que, unido a su buena selección de tiro, suele terminar en canasta. Taponador y reboteador insaciable, es capaz de anotar con facilidad despues de rebote ofensivo y en transición acostumbra a finalizar con espectaculares mates o alley-opps que ganan en mérito por los apenas 193 centímetros de altura del inusual pivot.
Sin duda una gran noticia para el Aquimisa Laboratorios - Queso Zamorano, que espera que mantenga el mismo nivel LEB Plata, una categoría con muchos más centímetros y jugadores con más físico en la pintura, pero que a buen seguro sabrá sacar ventaja de su juego y capacidad física.
Tras la incoporación de Jeff el juego interior que compuesto, por ahora, por Stefan Assanin, Dani López, Christopher Iza y el propio Jeff Solarin, sin duda una escuadra con gran capacidad defensiva y reboteadora en ambos lados de la pista, que encajará con los planteamientos diseñados por Saulo y Adrián.