El Descenso Ibérico celebra su 48ª edición con más de 350 palistas

El recorrido clásico se mantiene: desde Fresno de la Ribera, pasando por Villalazán y Villaralbo antes de alcanzar Zamora
El Descenso Ibérico celebra su 48ª edición
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El Descenso Ibérico del Duero regresa este sábado con una nueva edición, la número 48, que volverá a teñir de color y esfuerzo las aguas del río Duero este sábado 28 de junio. Con salida desde Fresno de la Ribera y meta en la Isla de las Pallas, la prueba reunirá a más de 350 palistas de distintos puntos del país, consolidándose como una de las citas más emblemáticas del calendario deportivo zamorano y parte esencial de las fiestas de San Pedro.

Organizado por la Delegación Provincial de Piragüismo y la Federación de Castilla y León, el evento mantiene su carácter competitivo y su valor simbólico: es, como recordó Rubén Pedruelo, presidente de la federación autonómica, “una forma de conectar a la provincia con la capital a través del río que nos define”.

La competición vuelve a apostar por su formato vespertino, la salida está prevista a las 17:30, y mantiene el desenlace en la pasarela roja junto a la Isla de las Pallas, decisión tomada por motivos de seguridad. Pedruelo fue claro al respecto: “Sabemos que el Puente de Piedra es un icono del Descenso, pero su entorno no reúne las condiciones adecuadas para una llegada segura. Hay zonas de fango, sequeras y una salida del agua muy complicada para los deportistas”. La meta actual, además de ser más segura, permite a los participantes acceder fácilmente al centro de piragüismo para cambiarse y prepararse para la entrega de premios.

También se ha tenido en cuenta al público: el cambio de horario y localización busca generar mayor afluencia y presencia ciudadana en el tramo final, integrando la prueba en la vida de la ciudad y en las tardes de paseo durante San Pedro.

La prueba presentará dos porteos: uno opcional en Villalazán y otro obligatorio en Villaralbo, que podría resultar decisivo en la lucha por el triunfo. La salida, como explicó Pedruelo, se hará desde el agua, ya que el terreno en la orilla se encuentra inestable por la crecida del cauce: “Una salida en tierra es más vistosa, sí, pero dadas las condiciones se convierte en un riesgo innecesario”.

El recorrido clásico se mantiene: desde Fresno de la Ribera, pasando por Villalazán y Villaralbo antes de alcanzar Zamora. Más de 180 embarcaciones tomarán parte en la competición, pese a que muchas figuras del piragüismo nacional se encuentran en plena actividad internacional. Aun así, el nivel será notable: entre los participantes destacan nombres como el K-2 femenino formado por Eva Barrios e Irati Osa, que usarán la cita como test de preparación para el Mundial de septiembre.

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