La calle Santa Clara se convierte en el escenario principal donde las murgas callejeras despliegan su magia y encanto. Tres grupos que se unen para animar el centro de la ciudad durante el carnaval.
Todos ellos muestran su mejor versión; una pasión desbordante y su dedicación inquebrantable. Con sus disfraces y energía logran contagiar el espíritu festivo del carnaval a todos los presentes en la calle Santa Clara. Todo ello con un único objetivo: hacer vibrar a la ciudad con su música y alegría.
Su amor por la tradición y su compromiso con la celebración hacen que sean verdaderas estrellas indiscutibles iluminando el centro de la ciudad con su arte y pasión. Son, sin duda, las estrellas del carnaval de Zamora.
