El sindicato profesional de Agentes Medioambientales de Castilla y León (APAMCYL), federado en USCAL-TISCYL-CESM, junto con el resto de organizaciones sindicales, ha decidido suspender su participación en la mesa técnica encargada de negociar el nuevo decreto que regulará las guardias del operativo de incendios forestales. La decisión se ha tomado tras once reuniones —tres de ellas en los últimos dos meses— en las que la Junta no ha presentado una propuesta que cumpla los mínimos exigidos por la parte social.
Según denuncian los sindicatos, la propuesta de la Consejería de Medio Ambiente no garantiza una cobertura adecuada del operativo durante todo el año. A pesar del incremento de temperaturas en la última semana, con registros superiores a los 30 °C y un alto riesgo de tormentas, el personal disponible apenas alcanza el 20 % del que debería estar activo en la Época de Peligro Alto, fijada para tan solo ocho días.
En esta situación, los agentes medioambientales alertan de una operatividad claramente insuficiente. Denuncian que, en algunas provincias, se ha designado solo a dos agentes en situación de disponibilidad para cubrir todo el territorio, obligándoles a recorrer más de 100 kilómetros para atender una emergencia, con tiempos de llegada superiores a una hora.
La propuesta presentada en la última reunión celebrada el pasado lunes ha sido calificada como “absolutamente inasumible” por la parte social, al considerarla incluso más deficiente que las formuladas en el inicio del proceso negociador. En palabras de los sindicatos, no se trata solo de una cuestión laboral, sino de seguridad pública y prevención de riesgos medioambientales.
La parte social ha expresado su absoluto desacuerdo con el modelo planteado por la Junta y ha dejado clara su intención de no volver a sentarse en la mesa técnica hasta que la Administración presente una propuesta “coherente, razonada y dimensionada”, capaz de asegurar un servicio de prevención y extinción de incendios forestales eficaz durante todo el año en Castilla y León.