
El presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, ha expresado su preocupación ante las pésimas predicciones de lluvia en algunas comunidades en las próximas semanas y que podrían disparar la probabilidad de incendios forestales, como ya ha sucedido en las provincias de Castellón y Teruel donde ya se han calcinado unas 3.000 hectáreas y se ha desalojado a más de una decena de municipios.
Mañueco asegura que la situación debería ser abordada en una Conferencia de Presidentes para que Gobierno y las diferentes Comunidades Autónomas adopten una estrategia común de prevención y extinción de incendios. "Unidos seremos más fuertes". Así lo ha trasladado en un hilo de mensajes en su cuenta personal de Twitter. Castilla y León aún mantiene reciente el recuerdo de los fuegos que devoraron buena parte de la Sierra de la Culebra en Zamora y Navalacruz, en Ávila.
El líder regional ha trasladado su solidaridad a los más de 1.800 afectados que permanecen alejados de sus hogares ante el avance de las llamas que avanzan voraces desde la declaración del fuego este pasado jueves y ante las fatales previsiones de viento que complican las tareas de extinción y alimentan el fuego.
En este sentido, Mañueco ha ofrecido "toda la colaboración de Castilla y León a los presidentes de las CCAA afectadas, Javier Lambán y Ximo Puig.