El Consejo de Gobierno de La Junta de Castilla y León ha aprobado el Plan de Inversiones Prioritarias con vigencia 2021-2025, que estará dotado inicialmente con 1.029.213.301 euros, para apoyar la prestación de los grandes servicios públicos, priorizando las actuaciones en las áreas de sanidad, educación y servicios sociales, con el objetivo de reducir los impactos negativos asociados a la crisis.
El volumen de inversiones previsto hasta 2025 supera en un 41,4 % la inversión destinada en el anterior Plan 2016-2020 y permitirá, además de dar continuidad a la prestación de los citados servicios, hacer frente a la nueva realidad provocada por la COVID-19, pandemia que ha constituido una grave amenaza para la salud mundial, la economía y las inversiones.
Por otra parte, el Pacto para la recuperación económica, el empleo y la cohesión social en Castilla y León recogía como medida 73 la elaboración de un Plan de Inversiones Sociales Prioritarias para el periodo 2021-2025, con unos recursos de, al menos, los 728 millones de euros previstos en el último plan -cifra superada en 301.162.078 euros, lo que implica un importante esfuerzo presupuestario de la Junta dirigido a la protección de los ciudadanos de la Comunidad.
El Plan de Inversiones Sociales Prioritarias tiene como objetivos la reducción del impacto de la crisis causada por el COVID-19, apoyar el bienestar público y la solidez económica de la Comunidad a largo plazo y garantizar el acceso de toda la población a servicios como la educación, la salud, y la atención específica de colectivos en situación de riesgo de exclusión social.