La llamada a la prudencia y al cumplimiento de las normas realizada por el Ayuntamiento de Benavente parece haber surtido efecto. Fuentes municipales han destacado la ausencia de incidencias destacables, más allá de una denuncia por desacato a la autoridad y la reunión de varios grupos de jóvenes, pero que rápidamente se disgregaron ante la presencial policial.
Las principales concentraciones se han producido pasadas las 22:00 pm en la zona del centro del municipio, pero que no han ido a más ni se saldaron con denuncias gracias a la supervisión de los agentes que realizaron durante la noche fundamentalmente tareas de disuasión. Todo pese a que durante la noche circularon varios vídeos de jóvenes en la zona, pero que no llegaron a más.
Ya a partir de la 01:00 am, coincidiendo con el cierre de la hostelería y restauración, la actividad se trasladaba a la zona de la pradera, por lo que tanto Guardia Civil y Policía permanecieron vigilantes. Según el parte policial constaba la concentración de unas 130 personas que se congregaban en este punto
El resto de incidencias se limitan a dos avisos por ruidos procedentes de domicilios particulares y una única denuncia por desacato a la autoridad, pero que no guardaba relación con el incumplimiento de las normas y medidas derivadas del Covid.
Fuentes municipales muestran su satisfacción por el ambiente de normalidad en una noche claramente festiva pero que se ha visto empañada por la suspensión de las fiestas del Toro Enmaromado a raíz del Covid-19. No obstante, mantienen el llamamiento a la prudencia en estos días con el ánimo de que en 2022 se puedan llevar a cabo "las mejores fiestas posibles" tras dos años de cancelaciones.