El BM Zamora se impuso este domingo 9 de febrero al Lafuente Pereda por 35-31 en un partido complicado en el Ángel Nieto. Tras el encuentro, su entrenador, Félix Mojón, analizó la victoria y destacó la dificultad de la categoría, subrayando que “nadie regala nada”.
“Ha sido un partido súper difícil, hemos sufrido muchísimo”, reconoció Mojón, quien valoró el triunfo como una “victoria de equipo grande”. Para el técnico, sacar adelante un encuentro complicado como este es una buena señal: “Si cuando jugamos mal ganamos a rivales tan buenos como estos, el día que juguemos bien la cosa irá mucho mejor”.
Uno de los principales problemas del BM Zamora en el encuentro estuvo en la defensa. Mojón explicó que el equipo sufrió especialmente en la primera mitad: “Nos faltaban ayudas y cuando nos separábamos nos generaban mucho problema con el pivote deslizando”. Además, destacó el buen planteamiento del rival: “Han preparado muy bien el partido, se ha notado que habían hecho los deberes y nos hicieron daño con los deslizamientos del pivote”. También elogió el papel de los juveniles del equipo cántabro: “Tanto Marcos como Lucas han estado muy bien, nos han creado muchos problemas”.
En ataque, el entrenador no consideró que su equipo dependiera demasiado de Giannini, quien firmó una gran actuación: “Ha estado muy bien. No creo que el ataque haya sido un problema, hemos metido 35 goles y, además, fallado lanzamientos claros y algún penalti”.
Mojón también explicó algunas decisiones tácticas, como la ausencia de Raúl en el partido: “Es un cambio de ataque-defensa y necesitábamos sobre todo sumar en defensa”. También se refirió a Hoyer, quien no participó para evitar riesgos: “Si podíamos no forzar, mejor”.
El técnico zamorano identificó el momento clave del encuentro en el ajuste defensivo sobre Sergio Rubio: “Cuando hemos subido con Guille y hemos hecho un impar, ellos hacían un cambio de posición y Sergio pasaba al centro. En ese momento, Guille se emparejó directamente con él y le obligamos a soltar el balón más rápido”. Mojón destacó el desgaste del jugador rival como factor determinante en los minutos finales: “Sabíamos que Sergio mueve muchos kilos, choca mucho y que en los últimos minutos no iba a estar al mismo nivel que al principio”.