La gran actuación de Mendieta bajo palos, acompañado por una defensa muy seria de los zamoranos, y el acierto ofensivo de un Raúl Maide que ya está ttoalmente recuperado de la larga lesión que le apartó de los terrenos de juego, permiten al Balonmano Zamora sumar un triunfo vital (19-24) para escapar de las posiciones de abajo.
Se presentaba el Rutas del Vino en casa del Zarautz con muchas necesidades y con la baja de Nacho López que se unía a la de Jortos, Luis Posado o Andrés y que dejaba sin uno de sus efectivos más importantes de cara a gol al cuadro zamorano. Pero los pistacho cuajaron un partido muy serio en defensa desde el inicio, robando balones que permitían correr al cuadro de Margareto y lograr las primeras diferencias.
A la buena defensa, siempre llegando a las ayudas, se unió la actuación de Mendieta bajo palos, cuajando quizá el primer gran partido del internacional argentino y formando hoy un tándem muy interesante con Miguel Guarido que detuvo un siete metros cuando salió y que permitió a los zamoranos seguir cosechando rentas interesantes.
Parecía que podía romper el partido el Rutas del Vino cuando mediada la primera parte Raúl Maide ponía el 3-7 en inferioridad y tras haber agotado ya Zarautz un tiempo muerto al ser los vascos incapaces de penetrar la defensa zamorana. Y esas buenas sensaciones continuaron en el banco zamorano hasta el 4-9 que fue la máxima renta de la primera parte tras dos goles de Samudio y Aravena que daban mucho aire a los zamoranos.
Sin embargo, el Balonmano Zamora ya es experto esta temporada en grandes comienzos que se complican y en varios partidos han tenido este tipo de rentas y las han desaprovechado, por eso y por el empuje de Zarautz, se volvió a comprimir el partido cuando Iker Ortiz marcaba tres tantos consecutivos y Margareto paraba el encuentro.
Apareció Jaime González al rescate del cuadro zamorano y, pese a que la buena renta conseguida se esfumó, los zamoranos consiguieron irse al descanso con dos tantos de ventaja (9-11) que permitían que siguieran mandando en el marcador como habían hecho durante prácticamente todo el partido.
Importante fue el inicio del segundo tiempo ya que Raúl Maide cogió la batuta y metió los dos primeros goles de los pistacho para que Zarautz no consiguieran acercarse más en el marcador y en el intercambio de goles salía mejor parado el equipo zamorano que marchaba por delante en el electrónico. Cada vez que parecía que podía llegar a meterse mucho más en el partido el cuadro local, aparecía Mendieta y sacaba una mano que permitía seguir respirando a los zamoranos y angustiaba al cuadro local.
En todo el segundo tiempo, los zamoranos mantuvieron, al menos, dos goles de diferencia, creciendo desde la defensa, pudiendo correr bastante menos y encontrando huecos en ataque después de amasar mucho la bola. En el tramo final, con Zarautz arriesgando, incluso aumentaron la renta hasta llevar el partido de nuevo a la renta máxima, cinco goles, y acabar ganando 19-24 un partido vital para romper la mala racha y escapar de las posiciones de abajo.
