El cuadro pistacho, que llegó a ir ganando 4-5 tras un inicio espectacular de Esteban Salinas, dio la cara en todo momento ante el FC Barcelona, y cumplió un sueño histórico mientras plantaba cara a un conjunto con algunas de las mayores estrellas del balonmano mundial y acabó cayendo por 38-25 ante el campeón de liga.
El Balonmano Zamora cumplió un sueño que hasta hace poco parecía inalcanzable, jugar en el Palau Blaugrana frente al mejor equipo de la historia del balonmano europeo, y además lo hizo plantando cara al cuadro de Xavi Pascual y perdiendo por 13 goles, la menor distancia por la que ha caído un visitante en el Palau.
Empezaron por delante los blaugrana, pero el equipo de Eduardo Garcia Valiente encontraba a Esteban Salinas en el pivote y el chileno, muy acertado, ponía por encima a los zamoranos con el 4-5. Durante unos segundos, el equipo zamorano iba por delante en el Palau. No volvieron a adelantarse los zamoranos, pero aguantaron todavía unos minutos el ritmo blaugrana hasta que, con 10-6, el técnico zamorano se vio obligado a pedir tiempo muerto para frenar a los barceloneses.
Ya no se pudo contener al ataque blaugrana, que subió el ritmo y jugó a lo que quiero, como ha hecho en el resto de encuentros de liga. Los zamoranos encontraron a Diego Reyes, también muy acertado en ataque, pero pese al buen trabajo defensivo, el FC Barcelona se marchó al descanso mandando ya en el electrónico por 20-11.
No se rindieron los Guerreros de Viriato a los que las bajas le impedían dar mas de sí pero que nunca negocian el esfuerzo y que volvieron a salir con el cuchillo entre los dientes y firmaron otro parcial de 4-5 de inicio en este periodo. De nuevo los azulgrana se escaparon en el marcador sentenciando el partido mientras todos los pistacho presentes en Barcelona se llevaban su particular recuerdo: Luis Posado paró un lanzamiento, Carletes marcaba un gol y el resto de los jugadores se llevaban algún recuerdo positivo del sueño de jugar frente al mejor equipo del mundo.
