El CB Zamora afronta un nuevo reto en Cartagena en un momento clave de la temporada. Después de tres derrotas consecutivas y un parón en la competición, el equipo de Saulo Hernández busca recuperar sensaciones y dar un paso adelante en la lucha por la permanencia.
El técnico zamorano reconoce la incertidumbre que rodea al equipo antes de este encuentro, pero destaca el buen nivel de los entrenamientos y la progresión tanto individual como colectiva de los jugadores. "Si tengo que hacer caso de cómo estamos en el día a día, el equipo compite y progresa", señala Hernández, aunque advierte de la dificultad de la segunda vuelta, con rivales reforzados y en busca de sus objetivos.
El encuentro ante Cartagena se presenta como un desafío importante. El conjunto murciano, al que el entrenador zamorano define como un "muy buen grupo de jugadores entrenados excepcionalmente", llega en plena forma tras disputar las semifinales de la Copa España y encadenar cinco victorias en los últimos seis partidos. Hernández insiste en la necesidad de respetar a un rival que ha demostrado su competitividad desde su ascenso.
Más allá del rival, el CB Zamora debe afrontar el partido con la mentalidad adecuada. El técnico reconoce que el equipo ha tenido problemas para reaccionar en situaciones adversas y destaca la importancia de mantener la fortaleza mental. "Cuando las cosas nos han ido un poco torcidas, el equipo se ha venido abajo más rápido de lo que me gustaría", admite Hernández, que ve en este aspecto un punto clave a mejorar en la segunda vuelta.
En cuanto a la plantilla, el equipo sufre la baja de Kevin, cuya lesión de espalda no tiene un tiempo de recuperación definido. Su ausencia obliga a reajustar el juego interior y el club estudia posibles incorporaciones en el mercado. "Sin agobios, pero viendo opciones", explica el técnico, consciente de la necesidad de reforzar el equipo si la lesión se prolonga.
Uno de los grandes retos del CB Zamora en este partido será el rebote, un aspecto en el que el equipo ha sufrido en las últimas jornadas. Hernández asume su responsabilidad en esta faceta y asegura que se está trabajando intensamente para corregirlo. Además, el equipo busca mejorar su efectividad en los tiros libres, aunque el entrenador considera que este es un aspecto más ligado a la confianza individual de los jugadores que a un problema táctico.
De cara al tramo final de la temporada, el objetivo del CB Zamora sigue siendo claro: la permanencia. Hernández subraya que la clave para lograrlo es competir en todos los encuentros y llegar con opciones de victoria en cada partido. "Habrá veces que la moneda caiga de cara y otras de cruz, pero lo que es seguro es que no debemos dejarnos partidos sin competir", concluye el entrenador.
El duelo ante Cartagena será una nueva prueba de fuego para un CB Zamora que busca reencontrarse con su mejor versión en un momento decisivo del campeonato.