El CB Zamora Enamora se prepara para su segundo enfrentamiento crucial en su camino hacia la LEB Oro con un Kevin Buckingham confiado en el trabajo en equipo, pero consciente como el resto de sus compañeros de la trascendencia de estas últimas citas en las que está en juego su presencia en la próxima temporada dentro de la LEB Oro. Será su último rival ante el que se juegue el ascenso de categoría en lo que prometen ser, de nuevo, 80 minutos de alta intensidad.
"Estamos encarando de una manera similar a la que fue la anterior final, pero esta es la final final", expresó Buckingham, reflejando la determinación del equipo por alcanzar la victoria. "La sensación de que no hay otra opción te empuja un poquito más a esa sensación de dejarte todo lo que tienes y saber que no hay segundas oportunidades", agregó.
Al abordar la familiaridad con el equipo rival en base a los encuentros dentro de la Liga Regular, Buckingham reconoció los aspectos positivos y negativos. "Sabemos de su potencial" y con jugadores con la "experiencia" previa de haber disputado un ascenso de LEB Plata a Oro. "Confío en que estemos preparados para ello".
Buckingham también destacó la importancia del espíritu de equipo y la versatilidad de los jugadores. "Hay muchos jugadores que están dispuestos para aparecer si a otros compañeros se les sobremarca o si no tienen un buen día". Además, enfoca la posible atención defensiva sobre él como una oportunidad de alivio para sus compañeros.
Con un enfoque positivo y un fuerte sentido de determinación, el CB Zamora Enamora se prepara para enfrentar este desafío con toda su energía y compromiso. La vista está puesta en la ida en Albacete de este sábado y con la mente puesta también en un Ángel Nieto que promete volver a rebosar ya con el récord absoluto de venta en el primer día tras superar las 900 entradas vendidas.