Un Aquimisa Laboratorios al que le costó centrarse tuvo demasiados problemas con las pérdidas de balón y no estuvo cómodo en la pista al menos en los dos primeros cuartos de juego en los que los riojanos del Clavijo Bodegas Rioja hacían un baloncesto lento que contagiaba a los de Saulo que hicieron quizá el peor partido visto hasta ahora al equipo zamorano.
Los dos primeros cuartos rompían la buena imagen que desde el inicio de la liga daba un CB Zamora que no se centraba en la pista y que se mantuvo follón y con poca iniciativa en la cancha. Los terceros clasificados en esta liga paseaban en el Ángel Nieto un baloncesto lento con ataques en estático bien ejecutados y que el CB Zamora no era capaz de paliar.
En el primer cuarto, tanteo corto con mucha defensa de contacto y poco juego efectivo, fallos continuos en el tiro exterior y mucho que crecer por delante para un equipo que no entraba ese juego vistoso y de ataque al que estamos acostumbrados. 20-21 fue el tanteo de un igualado cuarto.
Poco más se puede decir de un segundo cuarto en el que los del Aquimisa solo fueron capaces de meter 11 puntos más dejando el luminoso en un desesperante 31-37 para irse al descanso con seis puntos abajo y esperando una reacción por parte de los blanquiazules, ese baloncesto no era el de Niang, Iza o Somogy.
El tercer cuarto había puesto las pilas a los dos equipos en cuanto a velocidad de crucero en los ataques y en las defensas, con mucho más brío los de Saulo conseguían a cuatro minutos del final del tercer cuarto en disputa empatar el partido a 41 puntos, a partir de aquí todo abierto de nuevo para ambos equipos. Destacar la gran cantidad de tiros fallidos y la falta de acierto desde el exterior 2 de siete desde el inicio para los zamoranos. El partido seguía trabado y con pocas anotaciones, un gran Javier Beltrán hacía sus mejores minutos en este tercer cuarto que se lló esta vez el CB Zamora que recortaba ventaja y se ponía por delante 47-45.
Y llegaba el cuarto definitivo, un cuarto que continuaba con un baloncesto de control y con serios problemas de juego para los zamoranos que alternaban momentos de buenas acciones con fallos en el tiro y aciertos en momentos claves que levantaban al público de sus asientos en cada canasta que tanto Libroia como Niang hacían. La igualdad en el marcador hacía llegar a ambos equipos al último minuto de este emociante encuentro en una paridad tremenda, el 70-67 se dibujaba en el luminoso a tan solo 37 segundos para el final con posesión para el CB Zamora. El ataque volvía a ser trabado y complicado, la canasta que daría respiro y la victoria estaba por llegar y llegó de la muñeca de Iza 71-67 fue el resultado final para un CB Zamora que hoy creció de nuevo animado por su afición.