Figueruela de Arriba, un pequeño pueblo que ha mantenido vivas sus tradiciones a lo largo del tiempo, invita a los lectores a explorar su rica herencia cultural a través del texto "El Carocho y la Obisparra de Figueruela de Arriba". Este relato, escrito por Antonio Pérez Martín, se sumerge en las costumbres y vivencias que marcaron la historia de la localidad en la primera mitad del siglo XX.
La obra destaca personajes emblemáticos como el carocho, el soldau y la zarramangona, quienes representaban ritos ancestrales que, aunque han ido desapareciendo, permanecen en la memoria colectiva de generaciones pasadas. A través de una narración cautivadora, Pérez Martín presenta las festividades locales, que solían estar cargadas de risas, miedo y un fuerte sentido de comunidad entre los habitantes y los jóvenes de la región.
El texto no solo narra las representaciones festivas, sino que también desvela el simbolismo que subyace en estos personajes y en los eventos que daban vida a la cultura del pueblo. "El Carocho y la Obisparra" se convierte así en una ventana hacia la historia social y cultural de Figueruela de Arriba, donde lo sagrado y lo festivo se entrelazan de manera única.
