En enero, Fermoselle completó parte de los trabajos forestales del proyecto de la Reserva de la Biosfera Meseta Ibérica, enfocado en la restauración de ecosistemas y la biodiversidad local. El objetivo principal es recuperar las áreas dañadas por el incendio de 2017 y promover un entorno más seguro y saludable.
Se realizaron tareas de desbroce y siembra en más de 18 hectáreas, utilizando terrenos cedidos por particulares. Estos trabajos buscan restaurar tierras abandonadas y mejorar el hábitat de especies como la perdiz roja, el conejo y la liebre, que enfrentan un grave declive en la zona.
También se desbrozaron 4 kilómetros de caminos, facilitando el acceso a las parcelas y reduciendo el riesgo de incendios. Esta intervención mejora la conectividad local y ofrece rutas más seguras para la población y los visitantes, además de disminuir la vegetación susceptible a los fuegos.
Además, se restauraron cuatro palomares para las águilas perdiceras que habitan en Fermoselle. Estas acciones no solo favorecen a la fauna, sino que también impulsan el turismo ecológico, al mejorar el hábitat de las especies y atraer a quienes buscan disfrutar de la naturaleza.
Finalmente, se limpiaron ocho fuentes en áreas clave como la Fuente de la Noria y las Fuentes de las Jarrinas. Estas fuentes no solo sirven a la fauna local, sino que también son puntos de interés para quienes recorren las rutas de senderismo de la zona.
