Vecinos y colectivos de la comarca de Aliste han vuelto a movilizarse, al menos de forma simbólica y digital, para exigir una infraestructura largamente prometida y todavía sin ejecutar, la conversión en autovía de la carretera N-122 entre Zamora y la frontera portuguesa.
Bajo el lema “Aliste exige dignidad: ¡Autovía ya!”, una nueva campaña ha comenzado a circular en redes sociales y grupos vecinales, recordando que, pese a las promesas de sucesivos gobiernos, solo se han licitado 1,5 kilómetros de los 72 previstos. El resto del trazado continúa sin avances significativos: “Gobierne quien gobierne, los alistanos seguimos esperando. ¿Hasta cuándo?”, se preguntan en el mensaje, que denuncia también los peligros que supone la actual vía: “una carretera con curvas peligrosas, sin arcenes y con tráfico pesado internacional”.
La indignación ha crecido especialmente tras conocerse que la alternativa propuesta a corto plazo pasa por construir circunvalaciones provisionales sin doble calzada, lo que los vecinos no lo consideran como una solución estructural.
La comarca denuncia que mientras en otras provincias se inauguran autovías completas, Aliste continua con este problema, lo que contribuye al vaciamiento rural, la pérdida de oportunidades y la desconexión con Portugal.
Con esta campaña, los alistanos llaman a la unidad y al compromiso de toda la sociedad para no dejar caer en el olvido una infraestructura esencial:“Queremos lo que nos prometieron. Lo que nos merecemos. Una autovía completa, real, funcional".
