jueves. 18.04.2024
Zamora - Celta B (11)
Zamora - Celta B (11)

Si algo ha quedado claro hoy en el Ruta de la Plata es que un santo ha aparecido en numerosas ocasiones para salvar al Zamora CF que ha conseguido la victoria por 1-0 en casa. Pau Torres, con nombre y apellidos ha resguardado la portería una infinidad de ocasiones que podrían haber adelantado al Celta en el marcador.

Victoria necesaria para el Zamora que debe seguir ganando. Sin embargo, la teoría la saben, la práctica no tanto. Los viriatos sufrieron en los últimos 20 minutos, algo más que esperado, cuando un acto poco premeditado de Cordero los dejó con uno menos, solos ante el peligro.

Los rojiblancos comenzaron bien el encuentro, aunque no sabíamos cuánto iba a durar después de una escalada de derrotas que lo posicionan en la parte baja de la tabla. Con el Zamora no se sabe.  Un equipo con escasez de goles y que los necesita más que nunca para conseguir escapar del descenso.

Galería de imágenes Fotos Marcos Vicente

Los gallegos apretaban a los viriatos, conocen su problema y querían hacerles daño. Metían caña una y otra vez y hacían sufrir al Zamora que no tiene contundencia atrás. El Celta B tenía embotellado al equipo y hundía constantemente a la defensa rojiblanca.

Dos penaltis que podrían haber cambiado la sintonía del encuentro, pero ahí estaba Pau Torres, que con un halo invisible, equipación y guantes de portero salvó el marcador.

Sin embargo, en el minuto 43 la grada enmudeció y ocurrió lo que nadie esperaba. El Zamora se adelantó en el marcador tras un robo de balón de Dani Espejo que acabó con un tiro entre los tres palos de Baselga que anotó el primer y único tanto.

Una victoria necesaria para subir la moral de un equipo carente de defensa que ha sufrido un embotellamiento constante durante todo el encuentro. Y un santo, Pau Torres, que se ha llevado la ovación del público.

CRÓNICA | San Pau Torres, el ángel de la guarda del Zamora