El Zamora CF afronta una semana más tranquila tras su última victoria, aunque en el vestuario evitan caer en la complacencia. El central Bolo destacó que ganar siempre ayuda a afrontar los entrenamientos con mejor ánimo, pero subrayó la importancia de mantener la misma actitud, independientemente del resultado. "Si pierdes, no tiene que ser una semana triste. Hay que corregir errores y seguir adelante", afirmó.
El defensa valoró el triunfo ante el Barça como un paso adelante en el juego del equipo. "Hicimos muy bien la presión, estuvimos sólidos en defensa y, aunque solo marcamos un gol, generamos más ocasiones", explicó. Además, resaltó la dificultad de contener a un rival tan ofensivo y el mérito de haber evitado que generara peligro.
El próximo reto será el Andorra, un equipo con un estilo de juego similar al del Barcelona pero con jugadores más experimentados. Bolo reconoció que el encuentro será exigente, pero confía en que el Zamora pueda competir al máximo nivel para lograr los tres puntos. Sobre el estado del terreno de juego, el central minimizó su importancia: "Si el campo está mal, lo estará para los dos".
En cuanto a la competencia en su puesto, valoró positivamente la pugna con José Carlos y Carlos, futbolistas con experiencia en categorías superiores. "Intento aprender de ellos para mejorar", comentó. También destacó la diferencia entre Segunda Federación y Primera Federación, donde el nivel de los jugadores y la estructura de los equipos suponen un desafío mayor. Aun así, afronta la temporada con ilusión: "Enfrentarme a jugadores que he visto por televisión o que jugaron contra mi padre en Segunda División me motiva mucho".