Zamora es única y como tal vibró desde sus asientos en la noche de este sábado que congregó a miles de ciudadanos un IFEZA abarrotado. La gala en homenaje a la "valía y esfuerzo" a unos zamoranos que han sufrido los envites de una pandemia que se ha prolongado durante más de tres años y cuyos coletazos aún se sienten llenó por completo el recinto ferial tras el reparto de invitaciones gratuitas para asistir al concierto con un cartel de excepción.
Marta Sánchez, Abraham Mateo, Lorena Gómez, Blas Cantó, Vicco, Leo Rizzi y Andrés Suárez congregaron a a más de 3.200 personas en un concierto sentado pero que no evitó que cientos de ciudadanos se mantuvieran en pie para bailar al ritmo de canciones como "Señorita" o "Indomable". Con servicio de barra, el espectáculo se prolongó hasta la 01:00 de la madrugada con una actuación media de 30 minutos por artista en un acto que cerró la DJ Sofía Cristo.
Una gala en recuerdo a quienes ya no están, pero también a quienes han sufrido las consecuencias de los devastadores incendios que el pasado verano se cebaron con una buena parte de la Sierra de la Culebra. El presidente de la institución provincial, Francisco Requejo, pidió a la población en su discurso de apertura de una jornada que arrancó a las 11:00 horas, sentirnos "orgullosos de vivir en una provincia con este potencial humano y profesional. Sintámonos orgullosos de las mujeres y hombres de nuestros pueblos que sortean todos los días mil obstáculos. Sintámonos orgullos de ser como somos: únicos".
Los actos arrancaban de buena mañana congregando a más de 2.000 jubilados procedentes de asociaciones de toda la provincia a los que el presidente de la Diputación puso como "ejemplo de resiliencia". Entre misa castellana y un mercado con más de una veintena de stands de productos de la tierra -con especial presencia de productores de la Sierra de La Culebra como fue el caso de Cárnicas la Culebra o Aguardientes CervatO- los jubilaron disfrutaron de más de cinco horas de esparcimiento en el Pabellón de Cristal.
Una gala que continuó de la mano de Emilio Duró, profesor y empresario con 30 años de experiencia en calidad de asesor, de la mano de su conferencia “Pongamos que hablo de Zamora” como un ejemplo de motivación y emprendimiento. El concierto nocturno puso el broche de oro a una gala de lo más esperada por buena parte de la población y pese a que han sido muchos los que no han podido hacerse con las invitaciones para acceder a un espectáculo que ha resonado a orillas del Duero.
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