En la noche de ayer, La Virgen de la Soledad, recorrió las calles de la ciudad de Zamora, hasta la Iglesia de San Juan. Ya que el pasado sábado tras su coronación no pudo salir debido a las lluvias.
Cientos de fieles no se han querido perder esta procesión, ya que la Virgen de la Soledad es muy importante para todos los zamoranos.
La imagen de “La Soledad” como es conocida entre los zamoranos, recibe culto en la céntrica iglesia románica de San Juan de Puerta Nueva.
La Virgen está vestida con un sencillo manto y una túnica sin adornos, ambos en color negro. Cubre su cabeza una toca de encaje blanco y ostenta sencilla corona de metal dorado.
Luce una expresión serena y un bello rostro con una gesto de dulzura y tristeza que ayudan a conectar con el pueblo zamorano y con todos aquellos que la contemplan.
La Cofradía fue fundada en 1651 emulando una más antigua de la que tomó el nombre.
La Cofradía de Jesús Nazareno está formada por unos 11500 hermanas y hermanos, y organiza dos desfiles. Ambas procesiones salen de la Iglesia de San Juan de Puerta Nueva.
Uno de los desfiles tiene su salida el viernes Santo a las cinco de la madrugada y la talla de la Virgen de la Soledad cierra dicha procesión.
La otra salida tiene lugar el Sábado Santo a las ocho de la tarde y en esta procesión la gran protagonista es la Virgen de la Soledad.
El origen de la procesión del sábado es la vela que se hacía a la Virgen de la Soledad en la iglesia de la Concepción, tras este acto la imagen era devuelta al templo de San Juan con una procesión popular.
