La inundación provocada por el atasco de una tubería afectó gravemente el apartamento 1º B, habitado por Alonso Lorenzo Antón y su esposa, quienes se vieron forzados a vivir en condiciones insalubres y peligrosas. La situación se complicó aún más debido a la reciente invalidez de uno de los ancianos, que sufrió un ictus dejándolo con medio cuerpo paralizado.
Los vecinos, al percatarse del siniestro, se movilizaron para ayudar a la pareja. Tras contactar con el Banco Santander, donde se suponía que tenían un seguro, fueron redirigidos a Allianz. La aseguradora envió un perito que constató los daños severos en el apartamento, incluyendo el levantamiento del parquet y el bloqueo de puertas.
A pesar de que Allianz inicialmente ofreció una solución temporal cambiando el parquet por tarima, los afectados y sus vecinos nunca aceptaron esta propuesta. Sin embargo, la aseguradora afirmó que se había aceptado el cambio y procedió a instalar la tarima sin consulta previa ni presentación de opciones. La instalación defectuosa causó aún más problemas, incluyendo la caída de muebles y la deformación de un armario, aumentando el riesgo y el miedo de los residentes.
La comunidad, indignada por la falta de respuesta y la negligencia de Allianz, ha decidido tomar medidas. El presidente de la comunidad ha emitido una carta de protesta exigiendo una solución inmediata y justa. Si no se resuelve la situación en la próxima semana, se recurrirá a la Dirección General del Seguro y de Fondos de Pensiones, la Oficina Municipal de Información al Consumidor, y claro también a medios de comunicación y redes sociales para denunciar el trato deshumanizado de la aseguradora.
Esta lamentable situación refleja una grave falta de sensibilidad y humanidad por parte de Allianz, poniendo en riesgo la salud y el bienestar de personas vulnerables que han confiado en sus servicios durante años. La comunidad espera una respuesta urgente y satisfactoria para restaurar la vivienda a su estado original y garantizar la dignidad de los afectados.
