Los Presupuestos de Castilla y León para 2023 deberían recoger una partida de al menos 90 millones de euros para dar un giro de 180° grados en la política forestal de la Comunidad y evitar tragedias como la que ha sufrido la provincia de Zamora, que suma 67.000 hectáreas quemadas. Así lo expuso el secretario de UGT, Castilla y León, Faustino Temprano, que también puso como tope el mes de septiembre para llegar a un acuerdo en la Mesa de Diálogo Social sobre materia forestal, justo antes de la presentación de los Presupuestos regionales para 2023. "Sin una partida presupuestaria adecuada no se puede hacer nada", insistió Temprano, que dejó claro que, por el momento, "no hemos llegado a ningún acuerdo", a falta de producirse la próxima reunión del 26 de agosto.
Los planteamientos de UGT están claros: contratos de 12 meses para los trabajadores que se dedican a la limpieza de montes, reconocimiento de la categoría de Bomberos forestales y coordinar a los empleados de la administración y a los de las empresas privadas en materia de incendios.
Por su parte, el secretario general de UGT, Pepe Álvarez, que visita Castilla y León por tercer año consecutivo en verano, calificó de "dramática" la situación que se ha encontrado en Zamora por los fuegos y señaló que estos desastres naturales deberían tener una "dimensión europea", al tiempo que volvió a reclamar la dimisión del consejero de Medio Ambiente al asegurar que es "bueno que lleguen otras personas con proyectos nuevos".