Cinco parroquias y un grupo de vecinos "en lucha" contra la "impotencia" creciente entre los habitantes de los pequeños municipios de la zona de La Guareña y La Tierra del Vino. La Diócesis de Zamora ha presentado el proyecto "Identidad. Ruta turística" que busca implicar de manera activa a los vecinos de Sanzoles, Fuentespreadas, Venialbo, San Miguel de la Ribera y Argujillo para que se conviertan en los principales difusores del patrimonio local.
Un proyecto que nace de una "falta de autoestima" derivada del creciente fenómeno de la despoblación y ante el que este grupo de vecinos y las cinco parroquias de sus pueblos desean revelarse. "Tenemos un patrimonio, unas raíces, una historia. Estamos vivos y queremos mostrarlo". Una iniciativa tejida en torno a la Unidad Pastoral bajo la dirección de Timoteo Marcos Gamazo, párroco de Sanzoles, Venialbo, El Piñero, Fuentespreadas, Cuelgamures, San Miguel de la Ribera y Argujillo.
"En seguida vimos que debía de abrirse a más gente y sin dejar de tener un origen religioso debería de adquirir una dimensión social", asegura Timoteo. La pretensión es ir sumando a las distintas asociaciones culturales de estos municipios con la vista puesta en compartir actividades y realizar una promoción conjunta de toda la zona.
"No podemos quedarnos viendo el cortejo fúnebre, sino hacer posible que la vida en nuestros pueblos exista". En este sentido, el párroco ha asegurado que el futuro depende de la decisión de sus vecinos. "Es verdad que nuestra realidad es tan limitada que necesitamos ayuda, pero si no somos conscientes lo que nos venga no nos va a servir de mucho".
A su vez, el proyecto busca la unión frente al "Individualismo que se ha instalado también en nuestros pueblos" a través de un grupo de personas voluntarias que pongan en valor el patrimonio de la zona a través de cinco puntos turísticos fundamentales como es el Museo del Zangarrón de Sanzoles, la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción de Venialbo y su retablo (1550-1553) obra de Lorenzo de Ávila, la iglesia románica de Fuentespreadas y su ajuar románico que se conserva a día de hoy en el Centro Nacional Geológico pero que mantiene en el atrio una compilación en forma de mural.
De San Miguel de la Ribera se pondrá de manifiesto su "riquísimo patrimonio histórico" en la conocida como la aldea del palo donde se fundó un convento auspiciado por Santa Teresa de Jesús sobre la finca de la toresana Doña Guiomar de Ulloa. Un municipio que también acogió la creación de uno de los grupos que reflexionaban en torno a la reforma de Martín Lutero y cuyo hecho fue recogido por el escritor Miguel Delibes en "El hereje".
Por último, de Argujillo se destacará su iglesia -con orígenes del siglo XVI- realizada en una única nave abovedada encargada al arquitecto salmantino Tomás Martín, que cedió el proyecto sin rematar a un compañero de San Miguel de la Ribera.