Nuevas instalaciones y un resurgir empresarial en cuanto se han abierto las puertas del comercio en general, ellos se han renovado y los dueños de los bazares chinos, han aprovechado la pandemia para reflotarse, re-abastecerse y poner al mal tiempo y a las dificultades buena cara.
El rechazo inicial a cuenta de la pandemia que llegó de su país, no ha conseguido echar atrás sus negocios y afán de emprendimiento, aunque se han visto afectados como los demás. También y menos mal, todos hemos asumido su presencia desde hace décadas en Zamora, restaurantes y bazares son sus negocios de aterrizaje, y en este caso de crecimiento. Un crecimiento que ayuda a la ciudad puesto que son también muchos los empleados que pasan a formar parte de estos negocios regentados por personas de origen asiático.
Sus economías se han resentido pero el colectivo ha tomado aire y fuerza puesto que siguen siendo miles los zamoranos que consumen productos de los bazares chinos, que tanto en momentos de pandemia, como en desescalada, y se han visto reforzados en número de clientes al menos eso ocurría en momentos de cierre general.
Esta vez no hay sorpresas y esta tienda de ropa si que ha podido establecerse en un lugar emblemático con su traslado al centro de la ciudad como dimos cuenta en febrero. Ahora en un lugar de más tránsito en la Avenida Príncipe de Asturias, eje de la vida comercial y de juventud como no hay otro en la capital. Un traslado desde la calle de la Amargura donde antes estaba este negocio que se hará efectivo en breve y que ahora necesita personal para su nueva instalación.
Tienda de ropa para hombre, mujer y niño, sus dueños apuestan por la moda y el textil, en breve veremos sus instalaciones abiertas.
