"Intentar que la actividad no pare y menos aún, desaparezca". Con este propósito ha creado el zamorano Alberto Blanco la iniciativa "Ponte otra" dirigido a salvar la hostelería de la provincia ante las nuevas medidas que abocan a su cierre inminente.
La iniciativa invita a adquirir los productos que consumimos habitualmente en los bares y restaurantes por el precio establecido para consumirlos en la seguridad de nuestro hogar al que se nos llama a permanecer a consecuencia de la pandemia y pese a los múltiples llamamientos del sector a que son parte de la solución y del problema.
"Ponte otra" busca que esos establecimientos no echen el cierre definitivo permitiendo a los zamoranos seguir degustando nuestros productos más típicos y apreciados, fruto de una hostelería y restauración referente. A la vez, este acto supondrá un alivio para los locales que podrán evitar el cierre y aliviar así el stock de productos perecederos (especialmente en el caso de aquellos que no pueden ofrecer servicio a domicilio o no disponen de infraestructura y/o personal para ello y que se ven abocados al cierre este mismo viernes tras el anuncio de la Junta de Castilla y León).
La propuesta arrancó en la intimidad de la familia de este zamorano así como de su círculo más cercano, pero es extensible a todos los ciudadanos dentro y fuera de la capital y la provincia: "Si otros zamoranos lo aplican a sus locales habituales, podremos aportar un granito de arena a fomentar el consumo y la actividad de este sector y a la vez ser responsables con las medidas y restricciones a las que nos obliga la situación sanitaria", asegura Blanco.
Los zamoranos se muestran así más que conscientes de la situación, en una ciudad que va perdiendo locales y puntos gastronómicos, algunos de ellos míticos, lo que suma a todos los empleos indirectos, muchos de ellos relacionados con productos 'made in' Zamora y de entornos rurales que son especialmente vulnerables al cierre. "Los clientes podemos ayudar al consumo y a mantener la actividad en la medida que se pueda, pero el sector parece que va a tener que seguir asumiendo sus gastos aún con la trampa bajada y eso condena a muchos negocios zamoranos a la ruina y a muchos zamoranos a quedarse sin empleo".