"Hoy por fin, después de 22 días con la calle cortada empezamos a ver la luz al final del túnel". Es la voz de los comerciantes afectados por el tramo que ha permanecido cortado durante más de medio mes por el derrumbe de los edificios situados en el número 36 de San Torcuato y número 2 de la colindante calle Pelayo.
El acotamiento del paso desde la altura del Colegio Medalla Milagrosa ha tenido un efecto directo en sus negocios, que han visto reducidos sus ingresos derivado del cierre y que se suma ya a la crisis de la pandemia.
Zamoranos en general, pero especialmentre los comerciantes, han aplaudido la apertura de esta tramo que "tanta guerra" da y continúa dando, según sus propias palabras. Así lo han comenzado a expresar en las redes sociales al igual que se ha podido escuchar entre los viandantes que comenzaban a recorrer la zona, con los ojos puestos todavía en la fachada del edificio que permanece en rehabilitación.
Los comerciantes esperaban ansiosos la apertura tras varios días desde la finalización de las obras de montaje del andamio, algo que se ha demorado desde el pasado jueves 11 hasta este miércoles, 17 de febrero, tal y como han denunciado ante la desesperación de ver sus negocios directamente afectados.
Desde el Consistorio precisaron la necesidad de finalizar las obras de apuntalamiento y asegurar la zona para que no se produjeran nuevos desprendimientos como los que se originaron el pasaron 27 de enero, fecha en la que se decidió cerrar dicho tramo al público para evitar posibles accidentes.
Sus súplicas han sido atendidas cuando los operarios del Ayuntamiento de Zamora han procedido esta tarde a retirar las vallas que impedían el acceso a la zona.
Fotografía: JA García (Administración de Loterías Nº 4, San Torcuato)
