La Escuela Universitaria de Enfermería contará con un edificio "funcional, accesible, eficiente desde el punto de vista energético y capaz de dar respuesta a todas las necesidades", así lo explicaba Rafael Bérchez, arquitecto del proyecto en el acto que ha tenido lugar en el Ayuntamiento. Rosa Valdeón ha estado presidiento esta presentación a la que ha acudido el delegado territorial de la Junta, Alberto Castro, el vicerrector de Economía de la Universidad de Salamanca, Ricardo López, la directora de la Escuela de Enfermería, Marisol Sánchez y el concejal de Obras, Manuel Hernández.
El diseño del edificio se ha realizado con criterios de calidad y funcionalidad, la alcaldesa Rosa Valdeón destacaba la importancia de este proyecto de futuro para la ciudad, así como la importancia que tiene la ubicación del nuevo edificio, integrado en el Campus Viriato y enfrente del Hospital Virgen de la Concha.
La nueva sede se construirá sobre una parcela de 2.682 metros cuadrados, el edificio contará con dos plantas y tendrá espacio para ampliar en un futuro. La construcción se llevará a cabo con la subvención de 2 millones de euros concedidos por la Junta de Castilla y León, el delegado territorial resaltaba la necesidad que tenía la escuela de tener unas instalaciones adecuadas a la calidad educativa del campus zamorano. Esta inversión contribuirá a crear empleo en el sector de la construcción y mejorar las instalaciones de una escuela que hoy cuenta con más de 300 alumnos. 
El vicerrector de Economía de la USAL, Ricardo López, quiso resaltar el compromiso por parte tanto del Ayuntamiento como de la Junta para ofrecer a Zamora unos servicios que mejorarán la calidad del campus. "Los estudiantes tendrán una percepción integradora del campus, los alumnos tendrán la posibilidad de acceder a las prácticas con más facilidad", explicaba.
El edificio contará con dos plantas con espacios interiores abiertos con luz natural, la calefacción será mediante biomasa y el diseño y la envolvente proyectada permitirán reducir la energía necesaria para garantizar el bienestar térmico.
El proyecto que está realizado por los arquitectos zamoranos, Rafael Bérchez, Juan Conde y Dario Manzano tiene como plazo de finalización el 31 de diciembre. Durante este año se trabajará en el pliego de seguridad y de adjudicación.
