Las fachadas de los edificios de la Diputación se han iluminado de verde con motivo del Día Mundial contra el Cáncer.
La Residencia Virgen del Canto de Toro también el luce para conmemorar un día muy especial y apoyar a los enfermos oncólogicos que viven su enfermedad en medio de una pandemia que ha retrasado muchos diagnósticos.
En su comparecencia semanal, la consejera de Sanidad, Verónica Casado, adelantaba que Castilla y León atendió en 2020 a 18.225 personas que padecían cáncer, lo que supone un 15 por ciento menos que el año pasado, una cantidad "nada desdeñable" dada la situación de pandemia, ha afirmado, tras lo cual ha lanzado un mensaje de "esperanza" a estos pacientes ante una enfermedad que cada vez más se cura o se cronifica.
La consejera ha incidido en que los cánceres más comunes son el colorrectal, el de próstata, mama, pulmón y piel y la enfermedad afecta más a hombres que a mujeres.
A lo largo del pasado año en Castilla y León se detectaron 17.786 procesos oncológicos nuevos frente a los 17.597 de 2019, ha señalado la consejera, quien ha incidido que es una patología con influencia en cuanto a disposición genética pero que también está vinculada a hábitos de vida y se espera que los procesos aumenten en los próximos años con una previsión de superar los 18.000 en 2025 en la Comunidad, según los datos recogidos por La Vanguardia.
La prevalencia de la enfermedad, es decir, el número de casos totales en Castilla y León, es de 50.270 y a lo largo del pasado año fallecieron 7.555 personas, una cantidad "importante" si se tiene en cuenta que son unas muertes diarias.
Frente a esos datos, Casado ha enviado un mensaje de "esperanza" a todos los que han sido diagnosticados de esta enfermedad para que "no se rindan" porque hay "muchas posibilidades" de salir adelante, ya que "por suerte" a día de hoy "no es lo mismo que hace años" porque a pesar de la evolución "nefasta" de algunos casos, muchos "se curan" y otros se cronifican.
La consejera agradecido el trabajo de quienes trabajan en el diagnóstico, tratamiento, curación y "alivio" de estos pacientes, así como de los voluntarios y asociaciones que trabajan para mejorar su calidad de vida.
Verónica Casado ha apuntado que a pesar de que la COVID-19 acapara "gran parte" de la atención se trabaja de forma "muy intensa" para seguir abordando la patología no COVID y, "como no", el cáncer, porque muchos ciudadanos siguen enfermando y tienen la obligación de darles "la mejor respuesta" que se pueda en el contexto actual.
