Desde las 10:00 de este lunes, están teniendo lugar las II Jornadas de Trata y Explotación Sexual. Esta edición arranca bajo la gran pregunta: "¿Por qué el abolicionismo es la opción?"
Para ello, se ha podido contar con la intervención del Ayuntamiento de Santa Coloma de Gramenet, que busca poner a las mujeres en el centro de las políticas públicas. En representación de esta postura abolicionista, hablaban Maribel Cárdenas Jiménez y Graciela Atenció.
Maribel Cárdenas Jiménez, es directora de Políticas de Igualdad en el Ayuntamiento desde hace más de seis años y deja conclusiones tan importantes como que "la ley tiene que dar una respuesta a aquellas personas que están velando por los derechos de los niños y las niñas”.
Además, en su intervención defienden que “no somos putofobas (sic), todo lo contrario, en realidad lo que estamos poniendo en el centro son los derechos de las mujeres y que se les permita emprender un camino donde puedan decidir sobre las diferentes dimensiones de su vida”. Añadía que “en realidad, los que están deshumanizando a las mujeres son los hombres que compran sexo”.
Por último, ponía en relieve la necesidad de contar con un marco abolicionista a nivel nacional que permita poner en el punto de mira a los demandantes y proteja a todas aquellas mujeres y niñas en situación de prostitución.
Continuaba la jornada con la aportación dentro de este primer epígrafe de la postura abolicionista Graciela Atenció, periodista y editora durante más de dos décadas y media y directora de Feminicidio.net.
Comenzaba matizando lo que podría suponer el modelo no abolicionista, el cual se le concibe como la despenalización total de la prostitución. Según defiende Graciela "el consumo de la prostitución está vinculado a la proliferación del crimen organizado”.
Su intervención también dejó claves como que "España ocupa la primera posición (en consumo de prostitución) en Europa y el tercero en el mundo”. Aunque, en el lado positivo también indica que España es uno de los países con uno de los movimientos abolicionistas más importantes de Europa.
De nuevo, al igual que su compañera, finalizaba su aportación con la misma demanda, un marco legal estatal que penalice y persiga al proxenetismo. “No se puede considerar al proxeneta un empresario, el sistema que tienen para captar a las mujeres es la entrada, tal y como dicen ellas, a campos de concentración y a formas más extremas e no imaginadas de violencia”.