Ante la polémica y la fiesta de septiembre en honor a la Virgen de la Concha, el alcalde de Zamora, Francisco Guarido, expresa en su red social los argumentos de no entrar en guerras ni polémicas en relación a un tema ya más que debatido pero con el que se vuelve a tomar partido.
"Me quedo perplejo cuando veo que los actos de la Patrona de Zamora y sus fiestas de septiembre, la Virgen de la Concha, se presentan en la Diputación Provincial. Desde el Ayuntamiento siempre hemos apoyado todos los actos de los organizadores en la fiesta local que, más allá de los actos religiosos, se traduce además en las llamadas fiestas de septiembre en Zamora", ha comenzado indicado el primer edil de la ciudad.
También ha indicado que "es cierto que desde el año 2015 cuestiones muy secundarias cambiaron, básicamente en lo que tiene que ver con el hecho de que la imagen se llevara al Salón de Plenos y otras cuestiones que entiendo que la sociedad aceptó sin mayor problema, ya que las críticas en su día fueron marginales, con más ruido político interesado que nueces. Que ahora la presentación se lleve a la Diputación me sorprende y me decepciona, únicamente en lo que tiene que ver con los responsables de la Diputación".
De igual modo, ha mandado un mensaje al presidente de la Diputación, "quédate con el niño, como diría la sabiduría del Rey Salomón en su conocido juicio bíblico, ya que lo importante es que viva por mucho tiempo la Cofradía de la Virgen de la Concha (y ya cumple 950 años) y sus actos conmemorativos. Quien hace guerra en esto pierde, y desde luego el Ayuntamiento nunca va a hacerla".
Por su parte, ha dicho que "el Ayuntamiento seguirá apoyando a la Cofradía como siempre lo ha hecho. En eso consiste la política de este equipo de gobierno: apoyamos muchas cosas, compartamos las creencias o no, y en especial ésta, pero si alguien polemiza por la propiedad que se la quede, porque para nosotros las tradiciones pertenecen al pueblo, no a los políticos de turno".
Lo que está claro y todos los zamoranos tenemos en cuenta es que las fiestas de Septiembre siempre fueron en honor a la Virgen de la Concha y el marcado carácter cristiano no da lugar a dudas, quizá una alcaldía de izquierdas agnóstica y a confesional como el mismo estado español, también tendría que mostrar mano abierta a tradiciones católicas o de otras religiones, ya que en la libertad de ser está la de no ser, pero cuando uno es alcalde de todos y para todos gobernar no tiene o no debe tener signo político.
