Tras el cambio de ubicación una vez más del Mercadillo de los martes, la polémica vuelve también a saltar debido a varios problemas que han vuelto a ponerse en candelero debido a la estrechez de la zona de ubicación.
La estrechez de la que se quejan los comerciantes, y la falta de espacio tras el asfaltado y arreglo de la calle en la que ahora se ubica y la aglomeración que sufren los comerciantes a la hora de montar y desmontar sus puestos, son los principales problemas que se han puesto de manifiesto en esta nueva ubicación que desde este martes tiene el Mercadillo zamorano.
Los comerciantes se quejan al Ayuntamiento y los clientes valoran la proximidad de la ubicación como acertada ya que se ha acercado un poco más al centro de la ciudad, y la proximidad a la estación del tren y de autobús son buenos aliados a la hora de la llegada de visitantes de otras zonas de la capital y del alfoz zamorano.
Este martes el mercadillo que en esta nueva puesta de largo tras la reparación y asfaltado del Camino del Torrao arrancaba por primera vez tarde, debido a los problemas que intentarán solucionar ante el colapso del montaje y también en el desmontaje que por causa de la estrechez de la carretera en la que se instalaba no dejaba maniobrar a los comerciantes con sus furgonetas. El concejal de Comercio presente en la mañana del martes asumía que efectivamente había problemas de organización que deben tomarse con calma y mostró su propósito de arreglar este nuevo problema que se da al ser el paso demasiado estrecho para el tránsito de los comerciantes.