El Ayuntamiento de Zamora comunica que el Proyecto de Arreglo de Caminos, cuyo expediente debe ejecutarse antes del 31 de diciembre para que pueda ejecutarse en la anualidad que entra, será el último de carácter sostenible y extrapresupuestario que el Consistorio tiene previsto ejecutar de cara a 2020. Guarido informó, durante la Junta de Gobierno celebrada este miércoles, que el Gobierno ejecutará proyectos sostenibles extrapresupuestario, que no entran en las cuentas del Consistorio para 2020, por valor de 6 millones de euros. Se trata de planes de rehabilitación y mejoras en aceras, asfaltado, saneamiento y alumbrado, entre otros.
Dentro de esta batería de planes destacan por encima del resto el expediente para construir un muro de contención en la calle Burgos (a la altura de la intersección del Alto de los Curas), ubicada en el barrio de Vista Alegre, y la recuperación por vía judicial de varios caminos rurales de propiedad municipal que llevaban décadas usurpados por particulares.
La construcción que se pretende ejecutar en la calle Burgos, si finalmente el expediente sale adelante (algo más que probable toda vez que IU cuenta con mayoría absoluta en el Ayuntamiento), tiene por fin corregir el terraplén de la antena de Telefónica que ocupa parte del aparcamiento y uno de los viales de la calzada. El plan estipulado pretende levantar un muro de hormigón de siete metros, que se ejecutaría dando continuación al paso de peatones y recuperando toda la anchura que corresponde al vial. El coste de la intervención asciende a 200.000 euros y el periodo de ejecución sería de 4 meses desde el momento en el que se adjudicara la obra tras su correcto proceso de licitación.
Los caminos vuelven a ser de propiedad municipal tras sentencia judicial
Por otro lado, otro de los temas más destacados de la Junta de Gobierno fue la aprobación del proyecto de Arreglo de Caminos, cuyo expediente completo será aprobado la semana que viene. La acción suma un coste de medio millón de euros y afecta a los siguientes caminos: San Román de los Infantes, Dehesa del Penadillo, Muelas del Pan-Hiniesta, Camino Viejo de Toro, Josá de Bustamante, Hondo, La Nevera, La Chopera, Las Llamas, Puentico y Valbuena. Este proyecto se suma a otros de carácter similar y cuya inversión municipal, en su conjunto, es de más de 1 millón de euros. Una cantidad que el primer edil zamorano ha querido destacar como “la más alta que el Ayuntamiento de Zamora jamás haya orientado a estas tareas”.
Lo más interesante del proyecto es la recuperación por vía judicial de los caminos que transcurre entre Muelas del Pan y la Hiniesta y el camino de la Dehesa del Penadillo. El paso del tiempo y la inacción de los Gobiernos municipales pretéritos habían permitido que estas travesías de propiedad municipal fueran usurpadas –con instalación de vallas, alambradas y desvíos– por particulares. Ahora, el equipo de Gobierno las recupera tras haber acudido a los juzgados (en los cuales actualmente hay más casos como estos dos citados) y se dispone, no solo a adecentar las vías, sino que se ve obligado a rehacer los trayectos (con coordenadas topográficas especificadas para los contratistas que ganen el concurso público de licitación) por la desaparición de los mismos a lo largo de las décadas de abandono.
Un plan para disminuir el ruido en la ciudad
Amén de las intervenciones ya detalladas, Romualdo Fernández –tercer teniente de alcalde y responsable de movilidad– indicó que el Consistorio pretende aprobar en un mes un Plan de Acción Contra Ruidos en el término municipal de Zamora. Si bien es cierto que nuestra localidad se mantiene en niveles de ruidos de 2012 y que es una de las capitales de provincia con menos contaminación acústica de España, el Ayuntamiento está decidido a seguir trabajando para convertir a la urbe en un lugar libre de ruidos.
Fernández precisó que el mayor foco de ruido en la ciudad procede del tráfico rodado y con el fin de mitigar su impacto en la contaminación sonora de la capital se trabajará con las siguientes líneas de actuación: ampliar las zonas peatonales ya existentes para favorecer la movilidad a pie; crear nuevos espacios para el desplazamiento en bicicleta (más kilómetros de carril bici); impulso de los coches eléctricos e híbridos, manteniendo el 75% de descuento en el impuesto de circulación y apostando por vehículos de esta índole en el momento de reponer la flota municipal; mantenimiento de la calzada; instalación de pantallas acústicas de manera puntual; campañas de la Policía Municipal con el fin de ejercer un control de las emisiones sonoras; actualizar la ordenanza municipal sobre ruido, vigente sin modificaciones desde 1997.
