Diez días de impulso al lechazo: "De no tenerlo prácticamente en la carta a ser el plato estrella"
Las séptimas jornadas gastronómicas del lechazo cuentan con 28 restaurantes, algunos de ellos fieles desde los inicios de esta apuesta por revalorizar uno de los productos más reconocidos y que busca ganar terreno en la provincia
El restaurante Casa Cipri es uno de los participantes que suman una nueva edición con un menú más que asentado del que sirve una media de 20 a 30 paletillas diarias mientras que desde el Mesón El Carmen reciben a comensales procedentes de León y Galicia
Zamora y provincia vuelven a dar impulso a uno de los productos estrella en Castilla y León, pero cuya demanda no se sitúa en esta zona a la altura de otros como el asado tradicional. Para asentar y dar valor a este plato, las Jornadas Gastronómicas del Lechazo regresan en su séptima edición con el impulso de 28 restaurantes participantes a los que se suman 14 establecimientos que repiten en la segunda Ruta de la Gastrotapa.
Unas jornadas que suponen todo un impulso atendiendo a la demanda de este producto, tal y como reconoce Cipri de Casa Cipri. Su participación ha sido continua desde los primeros compases de una iniciativa que se ha confirmado como un éxito. “Es cuando la gente más se anima”.
Con hueco para una menú especial que ofrece paletilla de lechazo a 25 euros, el comedor con capacidad para 40 comensales recibe en estos días el 75% de sus reservas orientadas a este producto.
“Todos los días traemos entre 20 y 30 unidades y todos los días se gastan”. Una demanda acorde a la rotación de siete años de menús con los que la paletilla se hace un hueco gastronómico en pleno corazón de la ciudad.
La provincia también ocupa buen parte del tirón de estas jornadas. Con más de la mitad de los establecimientos participantes se ubicados más allá del área de Zamora y su alfoz, el menú del lechazo se hace presente en rincones de todo el mapa provincial desde Fermoselle a Benavente o de Toro a Puebla de Sanabria y Asturianos, entre otros.
Un impulso que se dobla en el caso de los establecimientos gastronómicos del medio rural. “Las jornadas han venido estupendamente, por lo menos para mi negocio. De no tenerlo prácticamente en la carta a ser el plato estrella”.
Teresa, del Mesón El Carmen, lleva 24 años al frente de un negocio que aprendió desde la cuna. Un oficio heredado de la fonda de sus padres y que se asentó como nuevo establecimiento con la construcción de la autovía.
La llamada de estas jornadas atrae a Asturianos a comensales procedentes de León y Galicia para disfrutar del IGP cuyo consejo regulador se ubica en nuestra tierra. Un encargo que va “del horno a la mesa” y que el año pasado le valió el premio en la categoría de Lechazo Tradicional.
Su apuesta este año ha pasado por una paletilla al horno de menú, mientras que su participación en la II Ruta de la Gastrotapa apuesta por un fondo crema de setas de boletus con un salteado de chantarelas y mollejas de cordero. Toda una delicia que pone sobre la mesa y la barra, la amplia variedad gastronómica que ofrece este producto Tierra de Sabor.