La necesidad urgente de luchar contra el cambio climático ha llevado al Ayuntamiento de Zamora a diseñar de forma global como será la ciudad del futuro. Los principales objetivos que se persiguen son que el peatón recupere espacio público y reducir tanto emisiones de gases invernadero como el ruido.
Para ello, el Consistorio ha elaborado un Plan de Choque a medio y largo plazo que pretende convertir Zamora en una ciudad más saludable, con actuaciones encaminadas a reducir el tráfico rodado, mejorar la movilidad, promocionar el uso de la bicicleta y fomentar el transporte público.
El alcalde de Zamora, Francisco Guarido, y el concejal de Urbanismo y Medio Ambiente, Romualdo Ferrnández, fueron los encargados de presentar esta mañana las líneas generales del nuevo diseño urbanístico. Las actuaciones más urgentes se centrarán en el entorno de los centros educativos y, de hecho, el edil de IU anunció que en el Pleno de mañana se aprobará una partida de 400.000 euros para poner en marcha los trabajos, que ya se han iniciado en el Colegio San José de Calasanz.
La idea es ampliar las aceras para conseguir un entorno escolar más seguro para padres, alumnos y docentes, un proyecto que se complementará con los llamados "caminos escolares seguros", una iniciativa para que "los niños de Zamora puedan ir al colegio de forma autónoma", en palabras de Romualdo Fernández. En 2021 ya se ha asignado una partida de 50.000 euros para este plan y, actualmente, se estudian otras posibles actuaciones en este sentido.
El concejal de Medio Ambiente anunció también la creación de una zona de bajas emisiones en el Casco Histórico, una red de ciclovías y la reestructuración de los aparcamientos para bicicletas. El proyecto va más allá e incluye una ciclovías periurbanas para comunicar Zamora con su alfoz. Un enlace permitirá al usuario conocer los puntos en los que se sitúan los aparcabicis en la ciudad.
Fernández también resaltó la creación de los llamados "aparcamientos disuasorios", estacionamientos situados en la periferia de ciudades, cuyo objetivo es que los conductores que pretenden acceder al centro aparquen en ellos y continúen su viaje en transporte público colectivo. Ya hay uno diseñado en la zona que abarca desde la calle de Villalpando hasta la estación de tren, y otro en estudio, este en el entorno de la carretera de la Aldehuela. Además, se instalarán puntos de recarga para los vehículos eléctricos en lugares estratégicos de la ciudad.
Dentro de esa visión global de la ciudad, el concejal de Urbanismo y Medio Ambiente destacó como futuros planes la reestructuración del tráfico en la zona de la muralla y la reducción de la circulación de vehículos en Cardenal Cisneros. En este punto, Romualdo Fernández avanzó que el Ayuntamiento ha elaborado una Manifestación de Interés para captar fondos europeos encaminados a la mejora de la movilidad.