Este sábado 21 de diciembre, la Plaza Mayor de Zamora se llenó de coches clásicos que llamaron la atención de los zamoranos. Vehículos cuidadosamente restaurados y de modelos emblemáticos como Citroën, Porsche, Dodge y Mercedes fueron los protagonistas de la jornada. La Asociación Zamorana Amigos del Coche Clásico organizó este evento, que combinó la pasión por los vehículos antiguos con una tradición local muy especial.
El evento tuvo como motivo principal rendir homenaje al antiguo guardia urbano, una figura vinculada a una tradición que consistía en entregar un aguinaldo a la Policía Local el día de Reyes. Los zamoranos solían recorrer la Plaza Mayor y la zona de La Marina para mostrar su agradecimiento a los agentes por su labor durante el año. Este acto simbólico fue revivido por la asociación con un toque de nostalgia y respeto por las costumbres de antaño.
Durante la concentración, los participantes entregaron regalos simbólicos al guardia urbano en la Plaza Mayor, recordando la antigua tradición. Después, los organizadores se dirigieron a la Residencia de Ancianos Virgen de la Paz, gestionada por las Hermanitas de los Pobres, para continuar con la entrega de obsequios, ampliando así el gesto de solidaridad hacia los más mayores.
Además de su carácter tradicional, el evento también sirvió para poner en valor el patrimonio automovilístico de la ciudad. Los coches expuestos, propiedad de los miembros del club local, representaron modelos históricos que han sido fundamentales en la evolución del automovilismo.
