La concentración de participantes en el Ayuntamiento, que tenían que ir ataviados a la antigua usanza para acompañar a los novios era el preámbulo de un especial rito y tradición que llevaba al enlace de INMACULADA GUERRA Y CARLOS SERRANO, los novios de este 2022 en el carnaval toresano.
Con la presentación del alcalde que vestía con la capa y el traje de boda institucional, se daba paso a la ceremonia "apadrinada" por Jose Manuel de la Fuente quien dio también fe de todo lo ocurrido, así comenzaba la ceremonia y la jornada que continuaba con la presencia de novios e invitados en la presidencia del Salón de Plenos del Ayuntamiento de Toro.
Las cintas y el aderezo tradicional fueron elegidos por la novia y consistían en esta ocasión en una medalla de la Virgen del Canto patrona de Toro y su alfoz. En señal de compartir los bienes y la vida a partir de la ceremonia, se entregaban las arras y sonaban las primeras canciones en la casa Consistorial, que hacía de templo civil para los contrayentes, la ceremonia que se oficiaba en el salón de plenos del Ayuntamiento de Toro como es tradición llegaba a su fin. Dos años después los novios hacían los honores y tras este lapso de pandemia, Toro volvía a tener una tradición viva en manos de sus vecinos.
"Prometo serte fiel en las barras del bar y también en las rutas al aire libre" ese fue el juramento de Carlos al recibir a su esposa, Inma. Ella fue mucho más seria y prometió amor incondicional a su marido.
Y tras la ceremonia de la boda, realizaron el recorrido habitual por las calles de la ciudad, que los llevó hasta la plaza de Toros para celebrar el BAILE NUPCIAL. Posteriormente se acudió al Hall del Teatro Latorre donde se celebró el CONVITE DE BODA, por cortesía del Excmo. Ayuntamiento de Toro.
Solo se permitió como es costumbre la entrada al convite de boda a todas aquellas personas ataviadas a la antigua usanza y que habían formado parte de la comitiva de acompañamiento a los novios. Toro ha vuelto al origen tras dos años de pandemia, los toresanos y visitantes cumplieron la tradición y disfrutaron de la misma en la calle como de costumbre.
