Los empleados de Siro han recorrido las calles de Toro con sus vehículos para reclamar mejores condiciones laborales a la fábrica que se asienta en la ciudad.
Desde el pasado 26 de mayo, los empleados convocan paros parciales de dos horas por turno para sentarse a negociar con la empresa, pero los dueños de Siro se han negado, hasta el momento, a recoger las reivindicaciones de los trabajadores.
Las posturas están muy distanciadas. La empresa plantea un incremento salarial de 0.8% para 2020 y del 1,2% para 2021, pero este aumento conlleva "la flexibilización de las vacaciones", lo que significa que "nos pasan de un turno a otro y algunos trabajadores verán bastante mermada su nómina".
Después de 4 días de paros, 26 de mayo y 2, 9 y 16 de junio, al inicio de cada uno de los turnos de trabajo, se ha realizado el último de los paros previstos y convocados hasta después de las vacaciones.
Em septiembre, si la fábrica sigue sin querer negociar, los trabajadores intensificarán sus movilizaciones.