A pesar de los esfuerzos continuos, el fuego se mantiene en Nivel 1, con el viento actuando como el peor enemigo en las tareas de extinción.
Durante la mañana de hoy, las brigadas de refuerzo han comenzado el relevo de los equipos en la zona, mientras los medios aéreos, que han sido fundamentales ayer, a primeras horas de la mañana se han retirado. El "paveseo" ha sido crucial en el desarrollo de la actividad nocturna y aún se produce por el incesable viento que puede provocar diferentes puntos de reavivado. Las pavesas de los focos activos se mueven por el aire y complican la labor de extinción.
A partir de las 12 del mediodía, las labores de refresco y contención se han intensificado, ya que el viento sigue avivando las llamas en varios puntos, complicando el control del incendio que aunque se haya estabilizado y se mantiene con llama en muy pocos focos, están siendo refrescados y localizados por los agentes medioambientales y brigadas anti incendios.
Los bulldozers continúan operando en el área más afectada, trabajando para crear cortafuegos y evitar que el incendio se propague. Aunque los bomberos portugueses que estaban combatiendo el incendio en Angueira, cerca de la frontera, se han retirado tras una noche de duro trabajo. La situación en el lado español sigue siendo de alerta y contención.
El humo, denso y sofocante, persiste en la zona, haciendo aún más difícil la labor de los equipos de extinción y afectando la calidad del aire.
El ambiente caluroso, aunque con una ligera caída en las temperaturas, sigue siendo un obstáculo significativo para la extinción total del fuego. Las autoridades mantienen la esperanza de que, si no surgen nuevos focos, se pueda avanzar hacia una reducción en el nivel de alerta a lo largo del día. Sin embargo, por ahora, la situación sigue siendo delicada, y la presencia de decenas de efectivos en la zona es crucial para evitar que el incendio se reactive y cause más daños en esta frágil zona cargada de pinos y robles además de monte bajo.
El consejero de Medio Ambiente Quiñones cifra en 50 las hectáreas de arbolado quemadas en la provincia de Zamora por el incendio que saltó anoche desde Portugal y confirma que ya "no hay llama" en territorio español y confía en que el fuego se pueda dar por controlado en las próximas horas.
Está claro que el Consejero Suarez Quiñones, tiene información de primera mano, pero lo visto esta mañana "in situ" dista de su realidad, la falta de medios aéreos que se retiraron después de las 11 de la mañana y la posibilidad de que se reaviven las llamas en focos alejados, es el máximo temor de los equipos que realmente conocen el terreno y están en los puestos de vigilancia habituales, y en los que se han montado para dirigir a los diferentes retenes por los caminos y carreteras que pueden llevarles a las zonas calientes.
La provincia se mantiene entre tanto en nivel ROJO EXTREMO según el PARTE METEOROLÓGICO las máximas en descenso, alcanzado los 35ºC la probabilidad de tormentas, ocasionalmente con granizo, en las montañas de la mitad este pueden tener consecuencias importantes, los ventos que soplarán, en el cuadrante Noroeste y en el resto del Oeste de la comunidad, mantienen un Riesgo de #IIFF extremo en casi toda #CyL.