La Policía Municipal y una dotación del parque de Bomberos con el camión escala, se disponían hace escasos minutos, pasadas las 9 de la mañana a entrar en un piso en la calle Churruca a la altura del número 16, tras el aviso de los sevicios médicos del Hospital Virgen de la Concha a emergencias que se percataban de que un paciente con problemas renales no había acudido a su sesión programada de diálisis esta mañana a pimera hora.
Los bomberos han entrado a la vivienda por una de las ventanas exteriores comprobando que no había nadie en casa y que la persona en cuestión y según vecinos del edificio estaba de viaje.
La intervención en estos de casos que se sospecha de que algo más grave podía haber pasado, hace pensar y recapacitar en que siempre es preciso concienciarnos que hay muchas personas que se preocupan por el estado de salud y las ausencias de todos. De ahí la necesidad de avisar y comunicar situaciones como esta, en la que se moviilizan los servicios de emergencias ante una indisposición o un posible mal mayor.
Gracias a Dios el susto ha quedado en un viaje y en una intervención más de los que siempre están y cuidan de todos nosotros.
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