El Nazareno de San Frontis, que no pudo salir en traslado hasta la Catedral para reunirse con su madre, ya descansa junto a ella, como todos los años, en la Catedral de Zamora, esperando un Martes Santo en el que, este año, no se separarán.
La Cofradía de Jesús del Vía Crucis procedió a trasladar ayer al Nazareno de San Frontis hasta la Catedral de Zamora y no pudo hacerse, como es tradición, en procesión. Sin embargo, ya descansan ambas imágenes juntas esperando un Martes Santo en el que no se despedirán pero en el que si que la cofradía de Jesús del Vía Crucis tendrá un emotivo acto.