Se cumplen 66 años de la Tragedia de Ribadelago, sin recuerdo vivo, todo rezuma abandono y soledad

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En estos primeros días de enero, en concreto este jueves día 9, conmemoramos el 66 aniversario de la catástrofe de Ribadelago, (9-01-1959), en la que perecieron 144 personas víctimas de la rotura de la presa de Vega de Tera, de la empresa Hidroélectrica Moncabril.

La Hidroeléctrica de Moncabril fue una empresa española dedicada a la producción de energía eléctrica. Fue fundada en 1946 con el objetivo de explotar los recursos hídricos en las provincias de Zamora y Orense para la producción de energía hidroeléctrica. Fue absorbida por Unión Eléctrica Madrileña (después Unión Fenosa) en 1969.

Era una noche fría y con niebla en un 9 de enero de aquellos años 59, una década que terminaba y en la que Franco había ido inaugurando pantanos y construcciones megalómanas que muchas veces no cumplían con los requisitos mínimos de seguridad como ocurrió con la Presa de Vega de Tera. De madrugada se dio la desdicha y 8 millones de metros cúbicos de agua dejaban un rastro de muerte y desolación, hoy en día sigue pendiente una de las muchas promesas que se hicieron para devolver la memoria en el recuerdo, un centro de interpretación en homenaje a las 144 personas que perecieron aquel viernes 9 de enero de 1959.

Nuestro homenaje póstumo y el recuerdo a aquellos sanabreses siempre tendrá un espacio en nuestro diario. Siempre el 9 de enero tendrá el lugar que se merece en la memoria y corazón de los zamoranos.

Ribadelago no ha recibido jamás ninguna compensación social, a pesar del desprecio para las vidas de sus gentes con que fueron tratados por la empresa Moncabril, y el perdón para los responsables del desastre ordenado por el régimen franquista. Ni siquiera disfrutan de una rebaja de la factura de la luz, que tanto bienestar les hubiera proporcionado en los abundantes días gélidos del invierno.

También mantienen sus problemas los de la sanidad pública decadente y sin médicos ni enfermeras que cubran las necesidades más básicas. Si algo necesitan han de acudir al Centro de Salud de Puebla, distante 20 kilómetros y sin transporte público.

El Ayuntamiento de Galende sigue teniendo graves problemas con el suministro tanto eléctrico como el de agua potable. Es triste muy triste pasear por las calles, ya sea por las del pueblo nuevo, o por las del viejo, calles en muchas ocasiones sucias y llenas de socavones.

En estos días de recuerdo el edificio sobre el que se proyecta el aula de la memoria histórica de Ribadelago, resuena el ruido de la tragedia.

A penas quedan cien vecinos en Ribadelago y sigue habiendo el abandono de la España Vacía, de la Sanabria vacilada constante, ya que mientras se arreglan iglesias y retablos de toda la zona la obra de la memoria ahora si permanece en el lugar de la tragedia. Finalizar con la promesa es lo más digno en memoria de los fallecidos, y actuar contra la despoblación de las que parecen olvidarse ya en ese RIBADELAGO que nunca fue de Franco.

Hoy 9 de enero de 2025 seguimos pidiendo para Ribadelago y para los Riballagueses, desde el recuerdo a sus víctimas, dignidad, consideración y respeto.