Garantizar el agua potable a los vecinos de los pueblos afectados por el devastador incendio de la Sierra de la Culebra. Este es el objetivo del plan de actuaciones que han presentado esta mañana la delegada territorial de la Junta, Clara San Damián, y el diputado de Medio Ambiente, Javier Faúndez, y que parte con un presupuesto inicial de 600.000 euros.
El plan incluye a 17 poblaciones con el fin de proteger los depósitos de abastecimiento de la entrada de agua turbia por el arrastre de ceniza tras el incendio que calcinó cerca de 31.000 hectáreas.
Las principales actuaciones se centrarán en realizar sondeos de emergencia en 9 de las 17 localidades: Olleros de Tera, Pumarejo, Villardeciervos, Las Torres de Aliste, Boya. Riofrío de Aliste, Cabañas de Aliste, Otero de Bodas y Ferreras de Arriba. En el resto, se acondicionarán los sondeos ya existentes.
Las obras previstas tendrán como prioridad evitar la contaminación de los arroyos con el arrastre de las cenizas que se producirá cuando lleguen las primeras lluvias fuertes. Se procederá a hacer limpieza en todas las captaciones con la retirada de vegetación, como explicó el diputado de Medio Ambiente, y en algunos puntos se construirán "cabañones" para evitar que el agua turbia penetre en las captaciones. También se realizarán suplementos de las arquetas para elevarlas por encima del terreno.
Por último, con estas obras se pretende también subsanar algunas deficiencias detectadas en las instalaciones ya inspeccionadas. Los trabajos se contratarán por la vía de urgencia para comenzar las obras antes de que lleguen las lluvias, aunque no hay peligro de desabastecimiento ya que los pueblos que lo han solicitado ya cuentan con agua embotellada almacenada.
Y para que los animales salvajes tengan comida se ha firmado un convenio con TRAGSA, empresa que se encargará del suministro a las ganaderías en breve, así como de colocar los bebedores.
En cuanto a los ganaderos afectados, San Damián cifró en unos 40 los nombres que componen una lista que "no está cerrada". Los ganaderos pueden comunicar los daños del fuego en las oficinas agrarias de su zona y su petición será "atendida", aunque su nombre "no figure en el listado inicial", afirmó la delegada territorial.
En cuanto a los apicultores, tanto la administración autonómica como la provincial cooperarán en el suministro de alimento para las abejas y en buscar nuevos asentamientos para sus colmenas, en el caso de que fuera necesario.
San Damián también adelantó que se está redactando por la vía de urgencia la orden que regulará la tala de madera para particulares, así como los pliegos para licitar la tala de los montes de utilidad pública.
