jueves. 28.03.2024
Niños Ucrania
Niños Ucrania

“Pasé la semana pasada en Ucrania, reuniéndome con niños y familias afectadas por la guerra, viendo la respuesta humanitaria decisiva de UNICEF y reuniéndome con autoridades, compañeros de Naciones Unidas y organizaciones aliadas.

Pude visitar Kiev, Irpin, Bucha, Zhytomyr y Lviv, y el tiempo que pasé en el país me proporcionó una visión clara del enorme impacto que la guerra en Ucrania sigue teniendo en los niños y niñas, tanto dentro como fuera del país, tanto en la región como en el mundo.

Los números son asombrosos y vale la pena repetirlos. Casi dos tercios de los niños de Ucrania están lejos de sus hogares, ya sea como desplazados dentro del país o como refugiados porque han huido a través de las fronteras como refugiados. Niños obligados a dejar sus casas, amigos, juguetes y pertenencias preciadas, familiares… y enfrentándose a la incertidumbre sobre el futuro. Esta inestabilidad les está robando precisamente su futuro: el trauma y el miedo pueden tener impactos duraderos en la salud física y mental de los niños.

Según las últimas cifras de nuestros compañeros de la Oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ACNUDH), un total de 277 niños han muerto y otros 456 han resultado heridos, en su mayoría debido al uso de explosivos en zonas urbanas edificadas. Este uso de armas explosivas en zonas pobladas y los ataques contra la infraestructura civil deben cesar. Está matando y mutilando a niños e impidiéndoles regresar a cualquier tipo de vida normal en los pueblos y ciudades que son sus hogares.

Al menos 256 ataques contra instalaciones sanitarias y una de cada seis ‘escuelas seguras’ apoyadas por UNICEF en el este del país han resultado dañadas o destruidas.

Estamos cada vez más preocupados por la situación del acceso al agua potable, con al menos 1,4 millones de personas en el este del país sin acceso a agua corriente.

Como muestran estos números, la guerra en Ucrania es una crisis de los derechos de la infancia, y UNICEF está trabajando para apoyar a los niños y sus familias en cualquier lugar del país. Este papel fundamental de UNICEF en Ucrania se refleja en el acuerdo alcanzado recientemente con el Gobierno para extender el programa de país de UNICEF hasta finales de 2023, como parte del marco de transición de la ONU.

Después de más de tres meses y medio de guerra, UNICEF y sus aliados están haciendo un balance de la respuesta humanitaria desplegada hasta el momento y dirigiendo esfuerzos durante el próximo período a las áreas más necesitadas. Hemos estado en Ucrania desde 1997 y nos hemos quedado durante la escalada del conflicto para ofrecer apoyo y proteger las vidas de los niños y las familias. Hasta la fecha, UNICEF ha llegado a más de 2 millones de personas con suministros de salud y acceso a agua potable segura. Más de 600.000 niños y sus cuidadores han recibido apoyo psicosocial y de salud mental, y más de 180.000 niños han participado en actividades de enseñanza.

Tenemos aliados en ambos lados de las líneas de contacto que trabajan para llegar a los niños y niñas con información crítica y suministros y servicios que salvan vidas. Hemos activado las misiones de respuesta rápida en el este del país, más cercano a los combates, y como resultado, hemos ayudado a familias en más de 100 albergues cercanos a la línea del frente y en lugares de difícil acceso. Sin embargo, a pesar de los intensos esfuerzos para garantizar un acceso humanitario seguro, rápido y sin obstáculos, persisten desafíos importantes en las áreas más afectadas de todo el país, y seguimos pidiendo un acceso seguro y sin restricciones para llegar a los niños allí donde estén.

En las partes central y occidental del país, donde la situación actualmente es un poco más estable, apoyamos y fortalecemos los servicios y a las autoridades locales y ONG que ya están allí. Un ejemplo son los Spilno (Juntos) Child Spots, lugares a los que los padres/madres y sus hijos pueden acudir para acceder a servicios de apoyo que incluyen terapia y apoyo psicosocial, obtener suministros e información, y tener la oportunidad de que sus pequeños jueguen con seguridad y normalidad mientras están sentados con otros padres, así como tener un rato de tranquilidad y apoyo guiado por compañeros. Pude ver lo crítico que es este apoyo en un centro Spilno en Bucha, donde el personal calculó que la mitad de los niños que asistían necesitaban algún tipo de apoyo psicosocial.

En Irpin visité dos escuelas dañadas por los enfrentamientos, poniendo en peligro la educación de casi 2.000 niños y niñas cuando comience el nuevo curso escolar en septiembre. Si bien no tenemos cifras verificadas del número de escuelas dañadas en el país, es probable que la cifra sea de miles. Reparar los colegios es una prioridad para UNICEF y el Gobierno para que los niños puedan retomar su educación con seguridad en septiembre.

Gracias al generoso apoyo de gobiernos, empresas y particulares, podemos continuar este trabajo en todo el país y la región, incluidas las ayudas en efectivo a familias extremadamente vulnerables.

Por último, tan importante como lo es esta labor, los niños necesitan paz.

UNICEF sigue pidiendo un alto el fuego inmediato en Ucrania y proteger a todos los niños de cualquier daño. Cada día que continúa esta guerra, aumenta el impacto devastador y duradero en los niños, en Ucrania, en la región y en todo el mundo”.

El uso de armas explosivas en Ucrania está matando y mutilando a niños e impidiéndoles...