El movimiento ciudadano de la Revuelta de la España Vaciada conmemorará su sexto aniversario con concentraciones y toques de campanas este domingo 30 y lunes 31 de marzo. Seis años después de su nacimiento, el colectivo sigue reivindicando un cambio estructural que ayude a frenar la despoblación y la desigualdad territorial, denunciando la falta de medidas concretas por parte de las Administraciones.
La Revuelta de la España Vaciada, que agrupa a múltiples asociaciones y plataformas de carácter nacional, mantiene su compromiso con la movilización social como herramienta para lograr sus objetivos. Sin embargo, lamenta que, pese a la gran manifestación de 2019 en Madrid, en la que participaron más de cien mil personas, la problemática de la despoblación haya pasado a un segundo plano en la agenda política, arrastrada por la pandemia y las sucesivas negociaciones de gobernabilidad.
Durante estos años, el movimiento ha promovido diversas campañas centradas en problemas concretos y ha reclamado medidas eficaces a las instituciones. Su hoja de ruta sigue marcada por el "Modelo de desarrollo de la España Vaciada", presentado en el Congreso en mayo de 2021, con propuestas consensuadas para garantizar un crecimiento equilibrado y sostenible del territorio.
En los actos programados para este fin de semana, se leerá un manifiesto en el que, por un lado, se reivindicará el valor del mundo rural y su papel en la sostenibilidad y el aprovechamiento responsable de los recursos naturales. Pero también se señalarán las amenazas que lo acechan, como la expansión de grandes empresas extractivas y la falta de respaldo por parte de las Administraciones públicas.
Bajo el lema "No queremos promesas, queremos hechos", el movimiento exigirá un Pacto de Estado que garantice la protección de los servicios esenciales, fomente la inversión en las zonas despobladas y afronte el problema de la vivienda, con el objetivo de revertir la tendencia demográfica y asegurar un futuro para estas comunidades.
