¿Por qué la tercera dosis causa más malestar que las anteriores?
Aunque los efectos secundarios de las vacunas son leves y se pasan en unos días, la tercera dosis está provocando que estos sean más comunes entre la población vacunada. Estos malestares no restas eficacia y seguridad a las vacunas, ya que está demostrado que esta dosis de refuerzo ayuda a seguir reduciendo la gravedad de la enfermedad y el riesgo de hospitalización.
Los efectos más comunes son la fatiga, la fiebre, el dolor en la zona del pinchazo o dolor de cabeza, síntomas que se pasan en unas 48 horas, pudiendo tomar ibuprofeno o paracetamol para llevarlos mejor.
Ante todo, tranquilidad porque los efectos secundarios tienen explicación. Esto sucede, como han explicado los expertos, porque si tenemos la pauta completa de vacunación, e incluso en algunos casos hemos pasado la COVID-19 recientemente, tenemos el sistema inmune sobreestimulado.
Este es, de hecho, el motivo por el que los expertos no están convencidos de que haya poner una cuarta dosis a la población en general. Dicho de otra manera, no conviene fatigar al sistema inmune.