El juez Juan Carlos Peinado ha llegado al Palacio de La Moncloa con anticipación a la declaración prevista para las 11:00 horas. La abogada de Vox, Marta Castro, también ha llegado para representar a las cinco acusaciones populares, incluyendo Hazte Oír. Aunque este grupo convocó una protesta cerca del complejo presidencial, solo asistieron unas veinte personas para criticar al presidente Pedro Sánchez y su esposa, Begoña Gómez.
Pedro Sánchez está citado para declarar como testigo en una investigación que afecta a su esposa, Begoña Gómez. A pesar de la trascendencia del evento, la administración de Sánchez ha mantenido una postura de "normalidad". Es la primera vez que un presidente en funciones comparece en la sede del Gobierno en una investigación judicial.
El eurodiputado de Vox, Jorge Buxadé, ha expresado que Sánchez está "nervioso" por la declaración y no podrá evadir preguntas como suele hacer en el Congreso. Buxadé espera que el presidente explique sus contactos con sociedades reguladas por el Estado para facilitar reuniones de su esposa.
Después de su declaración, Sánchez viajará a Palma para asistir a la ceremonia de juramento del nuevo magistrado del Tribunal Constitucional, José María Macías, y a una reunión con el rey en el Palacio de la Almudaina. Además, el PSOE ha convocado una reunión de su Comisión Ejecutiva Federal para la tarde, lo cual es inusual.
La declaración de Sánchez se lleva a cabo en el Ministerio de Presidencia, no en la residencia oficial de la Moncloa. Un amplio dispositivo de seguridad ha blindado el área desde temprano, y las acusaciones han expresado sus dudas sobre si el presidente se acogerá al derecho de no declarar en contra de su esposa. La protesta en los alrededores del Palacio reunió a un pequeño grupo de manifestantes con pancartas.