El Gobierno prohíbe los vapeadores de sabores
En un movimiento para abordar la salud pública, el Gobierno ha aprobado en Consejo de Ministros la prohibición de la venta de filtros, papeles de fumar o cápsulas que contengan aromas, cumpliendo así la advertencia realizada hace poco más de un mes por la nueva ministra de Sanidad. Además, se equipara la regulación del tabaco calentado a la del tabaco convencional, y se impone la obligación de incluir en el etiquetado el aviso de que es perjudicial para la salud.
La medida amplía la prohibición de comercializar productos del tabaco con aroma característico o que contengan aromatizantes en sus componentes, como filtros, papeles para fumar, envases o cápsulas, y prohíbe cualquier técnica que modifique el olor o sabor de los productos del tabaco, así como intensificar el humo en los productos del tabaco calentado. Además, los filtros, papeles y cápsulas no podrán contener tabaco ni nicotina.
A partir de ahora, las unidades de envasado y el embalaje exterior de los productos de tabaco calentado deberán llevar el mensaje: "El humo del tabaco contiene más de 70 sustancias cancerígenas", acompañado de una de las imágenes en color especificadas en la biblioteca de imágenes del anexo II del Real Decreto 579/2017, de 9 de junio.
Esta medida es parte del Real Decreto que regula aspectos sobre la fabricación, presentación y comercialización del tabaco y productos relacionados, afectando exclusivamente al tabaco calentado y equiparando su regulación con la del tabaco convencional.
La ministra de Sanidad, Mónica García, ha adelantado que el Gobierno está trabajando en el Plan Integral de Prevención y Control del Tabaquismo, con el objetivo de avanzar en la regulación de vapeadores, establecer espacios libres de humo y abordar otros aspectos para prevenir adicciones y proteger la salud pública.