jueves. 25.04.2024
Refugiados ucranianos huyendo de la guerra. Fotografía: Facebook de la Comisión Europea en España
Refugiados ucranianos huyendo de la guerra. Fotografía: Facebook de la Comisión Europea en España

Un mes de guerra en Ucrania ha causado el desplazamiento de 4,3 millones de niños y niñas, es decir, más de la mitad de la población infantil total del país, que se estima en 7,5 millones. De esos 4,3 millones, 1,8 han cruzado las fronteras con los países vecinos como refugiados, y 2,5 millones son desplazados internos dentro de Ucrania.

“La guerra ha causado uno de los desplazamientos de niños y niñas a gran escala más rápidos desde la Segunda Guerra Mundial”, ha asegurado la directora ejecutiva de UNICEF, Catherine Russell. “Este es un macabro hito que podría tener consecuencias duraderas en las generaciones futuras. La seguridad de los niños y niñas, su bienestar y el acceso a servicios esenciales están en riesgo debido a la incesante y terrible violencia”.

Según la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (OHCHR, por sus siglas en inglés), 78 niños han muerto y 105 han resultado heridos en Ucrania desde el comienzo de la guerra el 24 de febrero. Y estas cifras reflejan solo las informaciones que la ONU ha podido confirmar; es probable que el saldo real sea mucho más alto.

La guerra también ha tenido devastadoras consecuencias en la infraestructura civil y el acceso a servicios básicos.

La Organización Mundial de la Salud (OMS), por ejemplo, ha registrado 52 ataques que han impactado en instalaciones de atención sanitaria en el país durante las últimas cuatro semanas, mientras que el Ministerio de Educación y Ciencia de Ucrania ha informado de daños en 500 centros educativos. Se estima que 1,4 millones de personas carecen de acceso a agua potable, y 4,6 millones de personas tienen acceso limitado a agua o están en riesgo de sufrir cortes de agua. Más de 450.000 niños de 6 a 23 meses necesitan apoyo alimenticio complementario.

Más de 4 millones de niños ucranianos desplazados tras un mes de conflicto