La bicicleta, considerada una opción de transporte saludable y amigable con el medio ambiente, está siendo impulsada por numerosos ayuntamientos ante la inminente entrada en vigor de las zonas de bajas emisiones en ciudades de más de 50,000 habitantes. Sin embargo, la Organización de Consumidores (OCU) advierte sobre desafíos y disparidades en el acceso al servicio de alquiler de bicicletas en 23 capitales de provincia.
En Málaga y Oviedo, lamentablemente, no existe un servicio público de alquiler de bicicletas, dejando a los residentes y visitantes con la única opción de servicios privados que pueden llegar a costar más de 2,000 euros al año para un uso frecuente.
En otras cuatro grandes capitales, el servicio municipal de alquiler de bicicletas tiene tarifas que superan los 200 euros al año para un uso frecuente. Madrid con Bicimad cuesta 275 €/año, San Sebastián con DBizi 271 €/año, Valladolid con Biki 265 €/año y Barcelona con Bicing 232 €/año. Aunque en este último caso se trata de bicicletas eléctricas, Bilbao ofrece un servicio a un costo significativamente inferior de apenas 20 €/año.
La carencia de un seguro de responsabilidad civil que cubra posibles daños es otro problema común. OCU aconseja preguntar por la existencia del seguro antes de alquilar y, en su ausencia, considerar la contratación de uno, especialmente para aquellos que utilicen la bicicleta regularmente.
